Colombia y Brasil coinciden en la importancia de lograr la paz política y la paz militar en el mundo
Bogotá, D.C., 18 de abril de 2024 - @CancilleriaCol. Los presidentes de Colombia, Gustavo Petro y de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva, reunidos este miércoles en Bogotá, dialogaron sobre la importancia de lograr la paz más allá de sus fronteras.
En este sentido, dialogaron sobre la situación actual en Venezuela, Haití y Medio Oriente.
En referencia a Venezuela, en su declaración conjunta, los mandatarios subrayaron la importancia de mantener, en el espíritu del Acuerdo de Barbados, la interlocución y el diálogo entre el gobierno y los demás sectores políticos. Exhortaron al gobierno y a los sectores de oposición a contemplar la posibilidad de llegar a un acuerdo de garantías democráticas que pueda ser refrendado en las urnas, al tiempo que reiteraron su rechazo a cualquier tipo de sanciones, las cuales únicamente sirven para aumentar el sufrimiento del pueblo venezolano.
De igual forma, ambos presidentes expresaron su profunda preocupación por la dramática situación humanitaria en Gaza y reiteraron su llamado a un inmediato cese al fuego. Subrayaron que Israel debe cesar todas las acciones que afectan a la población de Palestina, cumplir con sus obligaciones bajo el Derecho Internacional, en particular, las adquiridas en virtud de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948, así como respetar las normas aplicables del Derecho Internacional Humanitario y el derecho internacional de los Derechos Humanos, con arreglo a la Resolución 2728 del 25 de marzo de 2024 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y de conformidad con las medidas provisionales ordenadas por la Corte Internacional de Justicia el pasado 26 de enero y 28 de marzo de 2024.
En este sentido, reafirmaron la urgente necesidad de una solución duradera al conflicto que incluya la solución de dos Estados, con un Estado de Palestina viable que conviva con Israel en paz y seguridad, dentro de unas fronteras mutuamente acordadas e internacionalmente reconocidas. Los dirigentes reiteraron su apoyo inquebrantable a la admisión de Palestina como miembro de pleno derecho de la ONU.
En cuanto a Ucrania, los presidentes deploraron la prolongación del conflicto y la pérdida de vidas humanas resultante de la crisis. Abogaron por el inicio de un diálogo y un proceso de paz, que tenga en cuenta los legítimos intereses de seguridad de todas las partes y que incluya la participación de todos los actores relevantes, incluidos los países no implicados directamente en el conflicto.
Los jefes de Estado resaltaron la importancia de garantizar el mantenimiento del diálogo y de los canales diplomáticos adecuados para encontrar una solución negociada al conflicto.
Finalmente, los líderes expresaron su inquietud por las crecientes tensiones geopolíticas y destacaron la necesidad de fortalecer el multilateralismo. Coincidieron en la urgente necesidad de revitalizar el diálogo y otras herramientas para la resolución pacífica de las controversias y sostuvieron que la diplomacia es el medio más eficaz para garantizar la paz y la seguridad internacionales.
Tanto Petro como Lula, apuntaron a la interdependencia entre seguridad y desarrollo, esencial para garantizar una paz duradera.
Durante su encuentro, los Presidentes también discutieron sobre la difícil situación en Haití, en particular por el deterioro de la situación humanitaria y de seguridad y manifestaron su apoyo a los esfuerzos de concertación política emprendidos por los actores haitianos. Manifestaron su expectativa de que la resolución 2699 (2023) del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sea implementada lo más pronto posible, con miras a restablecer la seguridad interna y saludaron el acuerdo alcanzado entre los actores políticos haitianos para la gobernanza, la transición de poder y la realización de elecciones inclusivas, libres y justas en un plazo razonable.
En este punto, subrayaron la necesidad de favorecer la cooperación internacional para establecer las bases para el desarrollo económico y social de largo plazo en aquel país. También saludaron los esfuerzos de concertación diplomática de organizaciones regionales como CARICOM y CELAC e instruyeron a sus cancilleres y ministros encargados de la seguridad a examinar y evaluar conjuntamente la contribución que los dos países pueden aportar en apoyo a las instituciones haitianas, incluyendo por medio del combate conjunto al crimen organizado.